25 de octubre de 2008

Cuidados de los Pies de tu hijo - Bebe - Niños - Embarazos Múltiples


Embarazos Múltiples
Bebe - Niños

Cuidado de los pies de tu hijo

Al nacer, los pies del bebé no están completamente desarrollados, sus huesos aún son pequeños y flexibles pudiendo deformarse; el pie no tiene arco y se ven gorditos porque cuentan con una almohadilla de grasa en la planta del pie que sirve de protección mientras los huesos se van desarrollando; esta almohadilla irá desapareciendo poco a poco cuando comience a caminar, un ejercicio muy saludable para el desarrollo del pie; pero podemos hacer otros tipos de ejercicios que también beneficiarán sus delicados pies.

* Coloque una almohadilla suave y mullida a los pies de la cuna, luego ubique al bebé de tal manera que pueda tocar con los pies esta almohadilla. Cuando el bebé sienta sus pies en contacto con la almohadilla lo inducirá a presionarla, potenciando su sentido del tacto y beneficiando la flexibilidad de sus pies.
* Haga masajes en los pies del bebé, sobretodo luego de un buen baño, es un gratificante físico y emocional. Frote la planta del pie del bebé con su puño.
* Asee bien el pie del bebé, debe tener especial atención en lavar y secarlos bien, sobre todo entre los dedos para evitar la aparición de hongos.
* Si vive en un lugar con clima seco, hidrate la piel para evitar la resequedad y formación de grietas.
* Una vez que el bebé empiece a gatear debe buscar ya el tipo de calzado que usará, el cual debe contar con suela flexible y ligera, que mantengan el pie firme, anchos para mayor estabilidad, etc. El calzado correcto contribuye a que el pie se desarrolle de manera natural y no se deformen.
* Las medias o calcetines también juegan un papel importante; si son muy ajustados pueden cortar la circulación sanguínea y si son sueltos generan arrugas que hacen puntos de presión pueden causar ampollas. El material recomendado es aquél que tenga al menos 50% de fibras naturales como el algodón o la lana
* No ponerle los mismos zapatos días consecutivos, los pies sudan y los zapatos absorben esa humedad, por lo que debe dejar que los zapatos se sequen completamente antes de ser usados nuevamente.

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