Embarazo
Para la mayoría de los psicólogos el embarazo es un acontecimiento tan importante que provoca en la mujer sentimientos encontrados. Por un lado, es un motivo de gran alegría; por otro, la causa de muchos temores. Los cambios emocionales se manifiestan ya durante el primer mes del trimestre aunque físicamente no hayan evidencias.
Es normal que en esta primera etapa experimentes estrés e inseguridad emocional. Si es tu primer embarazo, al principio no estarás segura de estar esperando un hijo y, a pesar de los cambios que irás percibiendo, tendrás momentos de dudas y desconcierto hasta llegar a asumir tu nueva situación.
Oír el corazón del feto y ver lo que está ocurriendo dentro de tí posiblemente te ayudará a aceptar con más alegría las pequeñas molestias que hayan aparecido. También es muy común durante estos meses tener miedo al aborto, especialmente si ya has padecido alguno. Este sentimiento desaparece a medida que avanza el embarazo y observas que toda va bien.
La apetencia sexual suele disminuir en esta etapa, bien debido al cansancio y molestias físicas, bien por prejuicios como temor a dañar al feto. Conviene que tu pareja conozca estos problemas transitorios para facilitar un clima de comprensión mutua. El embarazo puede incluso alterar la propia autoestima de la mujer: si valora mucho su profesión y su independencia quizá sienta el embarazo es un impedimento para el desarrollo pleno de su actividad profesional. Todos estos miedos desaparecen a medida que notes que puedes seguir llevando una vida “casi” normal.
En el segundo trimestre lo que prima es la tranquilidad. Tu carácter será más positivo y sereno que en el primer trimestre entre otras razones, porque los cambios hormonales tan marcados en los primeros meses tienden a estabilizarse poco a poco. Los síntomas del embarazo serán evidentes para los demás. El aumento del vientre te obligará a cambiar de ropa...y a llevar un ritmo de vida más tranquilo. Puede ocurrir que estos cambios físicos condicionen en parte tu vida laboral. En algunos casos, esto suele ser un motivo de preocupación. En casi todos los casos, a esta altura del embarazo en tu calendario de prioridades, tu futura maternidad pasará a ocupar el primer lugar.
Tus sentimientos de protección te llevarán a preocuparte por tu futuro bebé, incluso puede que llegues a soñar con él. A esta altura de tu embarazo, la mayoría de las mujeres redescubren a su propia madre. Te interesará su experiencia durante el embarazo y compartir con ella tus propias reflexiones y miedos. Suele aparecer, de nuevo, el apetito sexual perdido durante los primeros meses. Aprovecha sin miedo y acércate más a tu pareja. Es muy importante que durante estos meses inicies los cursos de preparación a la maternidad poruqe la información que allí recibas, además de compartir tu experiencia con otras personas te ayudará enormemente.
La tercera y última etapa se caracteriza por la aparición de los temores al parto mezclados con un gran deseo de tener al bebé contigo. La ansiedad puede ser controlada y atenuada con una buena preparación y con el apoyo que te darán los profesionales. A estos temores se añaden la incertidumbre ante el cuidado del bebé, el temor a que nazca con algún problema o a que se complique la situación en el último momento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario